(La película está disponible en NETFLIX con el título THE WIFE)

Antes existía el dicho, hoy obsoleto, que decía “Detrás de cada gran hombre, siempre hay una gran mujer”, en otras épocas esto fue verdad.

Joan Castleman (Glenn Close), una mujer reservada y elegante, es la perfecta esposa devota. Pasó cuarenta años sacrificando su propio talento como escritora para alimentar las ambiciones de su carismático esposo Joe (Jonathan Pryce) y su exitosa carrera literaria, haciendo vista gorda a sus infidelidades.

Su fiel pacto ha construido un matrimonio sobre un acuerdo mutuo desigual. En la víspera de la entrega del Premio Nobel de Literatura a Joe, Joan ha alcanzado un punto de quiebre. Su reto será confrontar la verdad, el gran secreto de la carrera de su esposo.

Los Castleman viajan a Suecia para recibir el premio Nobel. El arrogante escritor con los años se ha vuelto adicto a las alabanzas. En cambio las aspiraciones de Joan como escritora se vieron reducidas desde su juventud dentro del severo sexismo de principio de los años 60. Ella tenía un trabajo en una editorial, pero solamente para servir café a los hombres ejecutivos. Joan ve ahí una oportunidad y presenta un manuscrito de Joe para consideración. Cuando es rechazado ella se ofrece a arreglarlo, lanzando así a la pareja a décadas de una co-dependencia que ha permitido que Joe sea el gigante literario que es ahora.

Un inoportuno reportero, Nathaniel Bone, sigue a los Castleman a su viaje bastante de cerca. Está seguro de que Joe esconde algo obscuro y quiere sacarlo a la luz en una biografía falaz sobre el exitoso escritor. Nathaniel, se entromete y acecha a Joan, percibiendo en ella cierta vulnerabilidad. Ella se mantiene inquebrantable pero se asoma una punta del iceberg, dándonos a entender que su mundo, tal como estaba construido, está a punto de resquebrajarse.

Dirigida por el ganador del Oso de Plata en Berlín, Björn Runge, La Esposa revela el curso de un matrimonio que han llegado a este punto de ruptura, un enorme acuerdo mutuo que se viene abajo muchos años después, como una banda elástica que se estira y estira hasta romperse. La película es un examen de la complejidad de las relaciones en la edad madura.

La elección de Glenn Close fue más que acertada. Lo mismo que la de Jonathan Pryce para el rol masculino de una pareja que constituye una simbiosis, por más resentimientos que haya, no pueden vivir separados. No es casualidad que uno se llame Joe y ella Joan, la versión masculina y femenina del mismo nombre.

Por Lic. María Andrea Piazza